Hace unos años un genio del marketing se inventó aquello de los “must” de Cartier. “Must” de “must have”, o sea, “hay que tener”. En el caso de una joyería como Cartier, con los precios de los que hablamos, eso de que “hay que tener” y encima que los “hay que tener” sean varios, ciertamente tiene bemoles.
Yo vengo de una cultura distinta, en la que mi madre, para no comprarte algo, te decía que “no hay necesidad” (la brillante campaña de Cartier parece que no hizo mucha mella en ella). Y hombre, necesidad, necesidad, lo que se dice necesidad, sólo de respirar… (no, comer, en mi caso, no. En la época de la que hablamos mis reservas corporales me hubieran permitido salir airosa de todo un invierno nuclear…).
Pero a pesar de la contrarrevolución cultural liderada por mi madre (y – sospecho – otras de su especie) eso de los “must” se quedó en nuestra consumista cultura “pa siempre”. Ahora ya el tema es simplemente identificarlos. De la oferta que se nos presenta en ropa, en cosmética, en decoración… ¿cúales son los “musts” y cuáles los “cómo-has-podido-comprarte-eso”?
“Fácil” me dice Pantaleón pasando las páginas de una revista “sólo hace falta observar”.
Y en nuestra labor de observadores, observamos que son un “must” en la decoración low-cost, la Stockholm Rand y la Lappjung Ruta. Ahí va eso. ¿No os dice nada, verdad? Pues esto es la Stockholm Rand…
Y esto la Lappjung Ruta…
Ahora sí, ¿a qué sí? (por cierto ¿reconocéis en la foto de arriba las lámparas de Antonio Ortiz de las que os hablamos en el post La rentrée?)
La alfombra Estocolmo es ya todo un clásico de la decoración. Mide 170 x 240, vale 139€ y va bien con todo. Es prima hermana de una alfombra similar, sólo que más grande, que vende nuestra alfombrera fetiche Madeline Weinrib y sin la que no parece poder vivir Nate Berkus (¿recordáis a Nate del post “Antonio mea culpa“? Es el genial camuflador de ventanas…)
Lo de arriba son fotos del actual apartamento de Nate, pero es que la alfombra se la trajo con él ya desde el anterior…
La versión de Madeleine que usa Nate es más grande y posiblemente de mejor calidad, pero a 2000 euros la pieza, la de IKEA gana por goleada (Pantaleón, que sigue con la calculadora en mano desde el tema de la proporción aurea me dice que una de Madeleine da para catorce de IKEA…).
La única pega que le vemos a la Stockholm Rand (y sí, nos gusta especialmente referirnos a los artículos de Ikea por sus nombres suecos tan graciosos) es que es de algodón, y se ensucia más. Así que los de Zara Home, que son unos cracks, han sacado este invierno una versión en lana. Un poco más pequeña y un poco más cara (veinte euros más, tampoco es que sea una pasta) pero en lana (a pesar de la diferencia de materiales, al tacto, ambas la de Ikea y la de Zara, parecen iguales).
Con cualquiera de las versiones, la “deluxe” de Madeline, o las más asequibles de Ikea o Zara, se pueden hacer todas estas cosas.
La Stockholm Rand resulta que va de miedo con la mini Lappjung Ruta, que es una funda de almohadón (lo siento, Pantaleón no admite el vocablo “cojín”) con estampado similar al de su tocaya la alfombra. Juntos los coloca la super-gurú de la decoración televisiva Emily Henderson (su nombre no os dirá nada, pero en USA es como los Rolling)
Así que con Nate (de idéntica televisiva fama) y Emily liderando su causa, la Stockholm Rand prolifera en los mejores hogares. Es un must, creednos.
Su prima la Lappjung Ruta (de verdad, ¿no os parecen fantásticos los nombres?) es de más reciente creación, por eso no tiene aún tanta proyección social. Pero va camino. En el número de julio de Elle Decó hizo una estelar aparición en casa de Elvira Rigal, jefa de producción de la revista Elle.
(Arriba: alfombra Lappjung encima de la Stockholm, estanterías Expedit colocadas a ambos lados de la chimenea, butacas, mesa y almohadones también de Ikea)
Y en el House and Garden del mes de mayo nos enseñaron ambos, almohadón y alfombra Lappjung, en la selección editorial…
El almohadón reaparece, en el reportaje de Elle Deco, en el patio de la directora de estilismo de Nuevo Estilo, Mercedes Ruiz Mateos.
Y a pesar de que el reportaje de Elle Deco – queriendoles como les queremos, porque además de adorables hacen una pedazo revista – nos huele pelín a publireportaje porque es dificil creer que sea coincidencia que las tres casas que enseñan estén TAN pobladas de los “musts” de IKEA, lo cierto es que son una excelente prueba de lo que venimos defendiendo meses: Ikea mola, y mezclándolo con otras cosas buenas, queda muy resultón. Para muestra la casa de la directora de contenidos digitales de Hearst, Ana Multigner:

Vía Elle Deco. Consola, alfombras, pouff y butaca de Ikea. Escultura, fantástico Poppi de Felipao www.felipao.es que levanta el tono de toda la decoración.
A la Lappjung Ruta llevaba yo meses husmeándola. No la quiero de alfombra porque el suelo de mi casa escupe las alfombras (ninguna le va y vivo sin ellas) pero me parecía un material irresistible para “fabricarse” uno de estos…
Así que la compré – a espaldas de Pantaleón – y reside ahora en mi trastero esperando pacientemente que me anime a llamar al tapicero. Lo de la banqueta tapizada con la Lappjung (me como el Ruta, que la alfombra y yo nos conocemos tanto que ya estamos “on a first name basis”) es en realidad un premio de consolación. Peiné Marrakech, mono a la zaga, buscando un alfombrero que me hiciera un kilim blanco y negro con el que fabricarme esto…
Que es (era) un sofá de Andrew Martin de un precio inalcanzable para mi bolsillo. Para cuando pensé que había ahorrado algo y que quizás podría, Don Andrew me lo retiró del mercado. Pero como cuando se cierra una puerta se abre una ventana, un año después apareció un primo suyo en el catálogo de Maisons du Monde. Para ese sí me llega, pero no me gustan las patas…
¿Cambiarlas? ¿Comprar otra Lappjung ruta y convencer al tapicero? Mientras deshojo la margarita sé que me retirarán ambos del mercado… Que no os pase lo mismo a vosotros. Salid ya a la caza de la Stockholm Rand y la Lappjung Ruta, ¡por Dios!. Son un “must” os lo prometo. Y….¡Mandad fotos!
PD: Si vivís en Madrid, no os perdáis la IV edición de Decor Acción que comienza este jueves día 19 en el barrio de las Letras (mercadillo de antigüedades en las calles Cervantes, San Pedro y Quevedo e instalaciones y mucho más por todo el barrio). Durará hasta el domingo 22 y estará abierto todos los días de 11 de la mañana a 9 de la noche (salvo el domingo, que cierra al mediodía). Pantaleón y yo no hemos faltado ningún año, ¡es muy divertido! Iremos el mismo jueves para no perdernos nada de nada. ¿Quien sabe? a lo mejor nos encontramos allí… Me reconoceréis porque voy con un mono… 🙂 Más información en Decor Acción 2013